Distintos sindicatos mayoritarios como CSIF y CCOO han anunciado recientemente que el Ministerio de Universidades planea aprobar un Estatuto del Personal Docente e Investigador (PDI) en los próximos meses que serviría para actualizar la situación jurídica del personal docente universitario y creemos que, quizás de paso, también la del personal investigador. La noticia sería buena si no fuera porque la elaboración de este estatuto, a diferencia de lo que ocurrió con el Estatuto del Personal Investigador Predoctoral en Formación (EPIPF), se ha hecho totalmente a espaldas del personal investigador, sin buscar el diálogo y sin evaluar propuestas conjuntamente.
El Ministerio de Castells no ha querido darnos voz ni escuchar nuestras propuestas. Esto es especialmente desconcertante, dado que desde la Federación de Jóvenes Investigadores (FJI-Precarios) hemos realizado informes, análisis y propuestas sobre aspectos clave que podrían perfectamente tener cabida en el Estatuto del PDI, como el diseño de las contrataciones para evitar la precariedad y facilitar por fin la creación de una carrera laboral para el personal investigador, el aumento salarial que actualice las retribuciones a los costes de vida actual y elimine la pérdida de poder adquisitivo en esta última década, diversas medidas relacionadas con políticas de género e inclusión y demás aspectos que son necesarios tratar con urgencia.
La necesidad de un Estatuto del Personal Investigador ha sido un tema recurrente en los documentos que hemos ofrecido en los últimos años. Es más, en un comunicado denunciando la falta de subida salarial a investigadores postdoctorales fechado en febrero de este año ya alertábamos de la necesidad de que “se elabore con carácter de urgencia un Estatuto del Personal de Investigación” y también lo demandábamos en nuestro informe de 2018 “Hacia una carrera investigadora en España: medidas urgentes a corto y medio plazo”. El Ministerio de Ciencia y universidades de la anterior legislatura no quiso reunirse con nosotros para tratar nuestra reclamación de un estatuto propio para el personal de investigación (investigadores, gestores y técnicos) y decidió optar por elaborar un Estatuto del PDI centrado en personal docente universitario. El actual Ministerio de Universidades, que aparentemente se dedica en exclusiva a elaborar el Estatuto del PDI, no ha hecho ningún esfuerzo por su parte en intentar tendernos la mano y reunirnos para tratar este tema tras varios intentos de contacto por parte de FJI-Precarios. Esto es un error y tememos que este estatuto del PDI, al estar principalmente dirigido al personal docente universitario, no tenga en consideración la realidad del personal investigador de centros como el CSIC y otras OPIS, relegue a los investigadores postdoctorales a unos meros artículos menores que no ofrezcan soluciones a problemas profundos y obvie el papel fundamental del personal técnico y de gestión de proyectos en el sistema científico de España. El personal de investigación más precario no forma parte de los convenios y tememos que además quede fuera de este estatuto. Necesitamos, por lo tanto, un estatuto que haga justicia a las particularidades de nuestro sector, que siente las bases de una ansiada carrera laboral y que no nos subsuma como una anécdota dentro del personal docente, que es lo que hemos sido hasta ahora en términos legales y lo que tememos seguir siendo si no se nos deja formar parte de la elaboración de este estatuto. Un estatuto que, repetimos, hemos demandado desde hace años como uno de los pilares básicos para que los investigadores postdoctorales tengamos por fin una carrera laboral digna y unos derechos laborales y salariales asegurados.
Por ello, exigimos al Ministerio de Universidades que se organice lo antes posible una mesa de trabajo con FJI-Precarios y otras asociaciones y que en sus reuniones periódicas se discuta el contenido del borrador del estatuto, atendiendo a nuestras reclamaciones históricas y a lo que venimos demandando como colectivo desde hace dos décadas.
Creemos sinceramente que el avance hacia una mejora en los derechos laborales de un colectivo no se puede conseguir sin la participación del mismo: no se puede hacer un estatuto del personal docente e investigador y no contar con los investigadores. Por ello pedimos al Ministerio de Universidades que no siga dándonos la espalda, que escuche nuestras demandas y que nos tienda la mano cuanto antes para dar forma a un Estatuto que incluya la voz de una gran parte del colectivo afectado.